Sobre la actividad de este año afirmó que “siempre decimos que este no es sólo un festival, sino que además es un encuentro porque hay un intercambio constante de experiencias, conocimientos y las clínicas son la excusa para ir y dejar el granito de arena.
En cada una de las jornadas se puede ver público de todas las edades y cada músico llega con su propio punto de vista, además de las presentaciones que realizan sobre el escenario donde muestran sus proyectos y creaciones propias.
Los toques callejeros son otra de las maravillas que ha generado esta propuesta del Movimiento de Jazz.
Quienes concurren y ven lo que sucede en la calle donde el trabajo de cada uno permite crear espontáneamente música, sin dudas que es un gran mimo para todos quienes vemos en este arte un aporte para la sociedad”.
Hizo mención a una clínica sobre interpretación vocal que estuvo a cargo de Andrea dos Guimaraes y en la misma se nuclearon músicos y público en general que disfrutan de la música, pero allí se concretó un trabajo parejo donde todos se integraron y mostraron cómo la música logra esa conjunción.
En Mercedes además se aprecia cómo el músico tiene ese contacto directo con el público que lo hace aún más interesante porque cada uno da su parecer, hay aportes de ideas y es ese movimiento constante de información y comunicación humana que permite que la experiencia cada día se realce.
Finalmente, Martínez afirmó que “para mí cada encuentro de enero es una posibilidad de seguir creciendo en lo musical, es como mi recarga de batería para todo el año, porque aquí se logra una inspiración que podemos ir utilizándola en las diferentes actividades de los meses venideros.